viernes, 25 de septiembre de 2009

PGJDF inicia averiguación tras ataque a banco en Milpa Alta

La procuraduría capitalina busca precisar además de la identidad de los responsables si este hecho está relacionado con los otros incidentes, que han dejado daños materiales sin lesionados.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal inició una averiguación previa por el ataque con explosivos caseros ocurrido esta madrugada en el exterior de una sucursal bancaria en la delegación Milpa Alta.
Autoridades de la PGJDF confirmaron que los daños a esta sucursal fueron causados con latas de gas butano, con un "modus operandi" similar al de otras cinco explosiones registradas este mes en distintos bancos y establecimientos comerciales de la ciudad.
En este contexto, la procuraduría capitalina busca precisar además de la identidad de los responsables si este hecho está relacionado con los otros incidentes, que han dejado daños materiales sin lesionados.
Para tal efecto, además de los peritajes correspondientes se solicitará el video de las cámaras de seguridad de esta sucursal bancaria, en especial del área del cajero automático, donde fueron abandonadas las tres latas de gas butano que detonaron.
En entrevista televisiva, el subprocurador de Averiguaciones Previas Desconcentradas de la PGJDF, Luis Genaro Vásquez, confirmó que en esta ocasión los hechos ocurrieron en una sucursal Banamex ubicada en el número 13 de la calle Constitución, colonia Viveros Milpa Alta.
El funcionario detalló que todos los ataques son cometidos generalmente por grupos de dos o tres personas, en especial jóvenes, quienes visten sudadera con capucha para cubrirse el rostro y abandonan las latas de gas butano junto con un cohetón que funciona como detonante.
"Quien ha reivindicado los ataques de los días pasados es una célula del Frente de Liberación Animal, que usa consignas pseudo ecologistas, de protección contra los animales, y además incluyen protestas contra el capitalismo", indicó.
Hasta el momento, agregó, no se cuenta con retratos hablados de los responsables de ninguno de estos hechos, pues las cámaras de video de los establecimientos permite identificar el "modus operandi" pero no cuentan con resolución suficiente para mostrar con claridad los rostros. México, D.F.

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