Testigos aseguran que el funcionario, vestido de civil, amenazó con el arma a los elementos policíacos, argumentando que a través de una llamada se les había denunciado por cometer actor ilícitos
El director de Seguridad Pública del municipio de Soto La Marina, Rafael Bernal Rodríguez, encañonó con arma larga a agentes de la Policía Rural del estado, destacamentados en el municipio de Abasolo, cuando cumplían una investigación de robo de ganado, en el ejido La Peñita.
Lo anterior lo dieron a conocer testigos de los hechos, quienes poseen un video que fue grabado con un teléfono celular y quienes aseguraron que la acción del funcionario pudo haber desencadenado un enfrentamiento o causado una tragedia.
En las imágenes se aprecia a Bernal Rodríguez encañonando con arma larga, al parecer una escopeta, al jefe de grupo de la Policía Rural, destacamentado en Abasolo, Enrique Salazar Abugaber.
Según las investigaciones en torno a este caso, los hechos ocurrieron el martes 8 de septiembre, cuando agentes de la Policía Rural se encontraban en el Ejido La Peñita en una investigación sobre el robo de unos semovientes que había sido perpetrado en el Ejido La Esperanza, de Abasolo.
Los testigos relataron que cuando los rurales ya trasladaban a los presuntos responsables del ilícito para presentarlos ante la Agencia del Ministerio Público de Abasolo, dos patrullas de Seguridad Pública de Soto la Marina les cerraron el paso.
Descendieron dos hombres, uno vestido de civil y otro con uniforme, mientras que el resto de los policías se quedaron atrás de uno de ellos, su jefe Rafael Bernal Rodríguez, quien llevaba empuñada una arma larga en sus manos con cartucho cortado, encañonando hacia las patrullas de los agentes rurales.
Al ver esta acción, los mandos de los agentes rurales descendieron de sus patrullas y se dirigieron hacia quien los encañonaba, identificándose el sujeto vestido de civil con pantalón negro y camisa blanca mangas arremangadas como director de Seguridad Pública municipal, se trataba de Rafael Bernal Rodríguez.
Les dijo a los rurales que iba a detenerlos porque a través del número de emergencias 066 recibió una llamada de auxilio, donde le notificaban que agentes rurales estaban cometiendo actos de extorsión en el Ejido La Peñita.
Ante lo anterior los mandos rurales le informaron a Bernal Rodríguez que ellos estaban realizando una investigación ordenada por el fiscal de Abasolo, contestándoles que eso a él no le importaba, y subieron de tono los argumentos, sin dejar de encañonar a los rurales.
A quien prácticamente le tenía puesta la escopeta en el abdomen era al comandante Salazar Abugaber.
"A mí me vale, órale, pongan las armas en la caja de camioneta y súbanse a la patrulla, en la oficina nos arreglamos", presuntamente les ordenó Bernal Rodríguez a los rurales.
Pero en esos momentos una llamada telefónica vía celular, que se realizó a la Dirección Estatal de la corporación para informar de los hechos, puso muy nervioso al funcionario municipal.
Le dijeron que se trataba del director de la Policía Rural, Eduardo Mancilla Gómez, con quien se negaba a hablar, pero finalmente lo hizo porque se le informó que si no dejaba en libertad a los rurales habría de enfrentar problemas legales por la obstrucción de una investigación judicial.
Según los testimonios, tras colgar la comunicación con Eduardo Mancilla Gómez , Rafael Bernal Rodríguez se disculpó con los elementos y jefes de grupos, diciéndoles que él no era policía de carrera y que nunca había manejado un arma, retirándose inmediatamente del lugar con sus elementos.
Los afectados en esta semana interpondrían una denuncia judicial contra Rafael Bernal Rodríguez, por las amenazas vertidas y obstruir su trabajo con abuso del cargo que ostenta. Tamaulipas, Tamps.
Lo anterior lo dieron a conocer testigos de los hechos, quienes poseen un video que fue grabado con un teléfono celular y quienes aseguraron que la acción del funcionario pudo haber desencadenado un enfrentamiento o causado una tragedia.
En las imágenes se aprecia a Bernal Rodríguez encañonando con arma larga, al parecer una escopeta, al jefe de grupo de la Policía Rural, destacamentado en Abasolo, Enrique Salazar Abugaber.
Según las investigaciones en torno a este caso, los hechos ocurrieron el martes 8 de septiembre, cuando agentes de la Policía Rural se encontraban en el Ejido La Peñita en una investigación sobre el robo de unos semovientes que había sido perpetrado en el Ejido La Esperanza, de Abasolo.
Los testigos relataron que cuando los rurales ya trasladaban a los presuntos responsables del ilícito para presentarlos ante la Agencia del Ministerio Público de Abasolo, dos patrullas de Seguridad Pública de Soto la Marina les cerraron el paso.
Descendieron dos hombres, uno vestido de civil y otro con uniforme, mientras que el resto de los policías se quedaron atrás de uno de ellos, su jefe Rafael Bernal Rodríguez, quien llevaba empuñada una arma larga en sus manos con cartucho cortado, encañonando hacia las patrullas de los agentes rurales.
Al ver esta acción, los mandos de los agentes rurales descendieron de sus patrullas y se dirigieron hacia quien los encañonaba, identificándose el sujeto vestido de civil con pantalón negro y camisa blanca mangas arremangadas como director de Seguridad Pública municipal, se trataba de Rafael Bernal Rodríguez.
Les dijo a los rurales que iba a detenerlos porque a través del número de emergencias 066 recibió una llamada de auxilio, donde le notificaban que agentes rurales estaban cometiendo actos de extorsión en el Ejido La Peñita.
Ante lo anterior los mandos rurales le informaron a Bernal Rodríguez que ellos estaban realizando una investigación ordenada por el fiscal de Abasolo, contestándoles que eso a él no le importaba, y subieron de tono los argumentos, sin dejar de encañonar a los rurales.
A quien prácticamente le tenía puesta la escopeta en el abdomen era al comandante Salazar Abugaber.
"A mí me vale, órale, pongan las armas en la caja de camioneta y súbanse a la patrulla, en la oficina nos arreglamos", presuntamente les ordenó Bernal Rodríguez a los rurales.
Pero en esos momentos una llamada telefónica vía celular, que se realizó a la Dirección Estatal de la corporación para informar de los hechos, puso muy nervioso al funcionario municipal.
Le dijeron que se trataba del director de la Policía Rural, Eduardo Mancilla Gómez, con quien se negaba a hablar, pero finalmente lo hizo porque se le informó que si no dejaba en libertad a los rurales habría de enfrentar problemas legales por la obstrucción de una investigación judicial.
Según los testimonios, tras colgar la comunicación con Eduardo Mancilla Gómez , Rafael Bernal Rodríguez se disculpó con los elementos y jefes de grupos, diciéndoles que él no era policía de carrera y que nunca había manejado un arma, retirándose inmediatamente del lugar con sus elementos.
Los afectados en esta semana interpondrían una denuncia judicial contra Rafael Bernal Rodríguez, por las amenazas vertidas y obstruir su trabajo con abuso del cargo que ostenta. Tamaulipas, Tamps.
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