Anoche, una banda dedicada al robo y secuestro en esa zona, llegó a la residencia de Saúl Mauza, prestamista libanés, quién el año pasado escapó de otro secuestro en el que participaron Zetas, con el propósito de “levantarlo” y pedir rescate por él.
Tras una intensa balacera, en la que murió un delincuente cubano, la policía frustró el secuestro de un prestamista de origen libanés, que pretendía realizar un grupo de encapuchados, en la zona residencial de Alfredo V. Bonfil en esta ciudad, confirmó la procuraduría General de Justicia Estatal.
Para reforzar a la policía municipal, llegaron agentes de la judicial y efectivos del Ejército con dos tanquetas y ametralladoras, para responder al fuego de los delincuentes, quienes al percatarse de que un convoy de la policía se acercaba, atacaron con armas largas; los gendarmes pidieron refuerzos.
Anoche, una banda dedicada al robo y secuestro en esa zona, llegó a la residencia de Saúl Mauza, prestamista libanés, quién el año pasado escapó de otro secuestro en el que participaron Zetas, con el propósito de “levantarlo” y pedir rescate por él.
Cuando preparaban la asonada, en la esquina de las calles de Durazno y Cereza, apareció un operativo de la policía municipal; los delincuentes abrieron fuego contra los gendarmes, quienes pidieron refuerzos y el tiroteo se generalizó cuando llegaron judiciales y una columna militar del 64 Batallón de Caballería Motorizada.
Al verse rodeados los secuestradores trataron de escapar; uno de ellos, el cubano Loy Navarrete Molina, de 28 años, cayó abatido por dos disparos, uno en la espalda y otro en el brazo izquierdo cuando corría para huír.
Sus cómplices tomaron como rehén a un velador, Javier Canto Medina, a quién amagaron a punta de pistola y subieron a una camioneta Windstar; otros abordaron otra camioneta Lobo y escaparon.
Una patrulla de Seguridad Pública que circulaba por el lugar se percató de lo que sucedía y detuvo a uno de los delincuentes, Elmer Espinoza Velázquez, quien identificó al caído y proporcionó a la policía datos de sus cómplices y la dirección de una casa de seguridad cerca del lugar del enfrentamiento, en donde se refugiaba la banda.
El resto de los pistoleros a quienes la policía relaciona con narcotraficantes desempleados de la zona lograron escapar. El velador, Elmer Espinoza, de 50 años de edad, fue liberado frente a la subestación eléctrica Nizuc, a unos diez minutos de la balacera.
El parte militar establece que el grupo de sospechosos sostuvo el tiroteo en el cruce de las calles Lázaro Cárdenas y Venustiano Carranza, junto a un negocio de video.
Cancún ,QR
Tras una intensa balacera, en la que murió un delincuente cubano, la policía frustró el secuestro de un prestamista de origen libanés, que pretendía realizar un grupo de encapuchados, en la zona residencial de Alfredo V. Bonfil en esta ciudad, confirmó la procuraduría General de Justicia Estatal.
Para reforzar a la policía municipal, llegaron agentes de la judicial y efectivos del Ejército con dos tanquetas y ametralladoras, para responder al fuego de los delincuentes, quienes al percatarse de que un convoy de la policía se acercaba, atacaron con armas largas; los gendarmes pidieron refuerzos.
Anoche, una banda dedicada al robo y secuestro en esa zona, llegó a la residencia de Saúl Mauza, prestamista libanés, quién el año pasado escapó de otro secuestro en el que participaron Zetas, con el propósito de “levantarlo” y pedir rescate por él.
Cuando preparaban la asonada, en la esquina de las calles de Durazno y Cereza, apareció un operativo de la policía municipal; los delincuentes abrieron fuego contra los gendarmes, quienes pidieron refuerzos y el tiroteo se generalizó cuando llegaron judiciales y una columna militar del 64 Batallón de Caballería Motorizada.
Al verse rodeados los secuestradores trataron de escapar; uno de ellos, el cubano Loy Navarrete Molina, de 28 años, cayó abatido por dos disparos, uno en la espalda y otro en el brazo izquierdo cuando corría para huír.
Sus cómplices tomaron como rehén a un velador, Javier Canto Medina, a quién amagaron a punta de pistola y subieron a una camioneta Windstar; otros abordaron otra camioneta Lobo y escaparon.
Una patrulla de Seguridad Pública que circulaba por el lugar se percató de lo que sucedía y detuvo a uno de los delincuentes, Elmer Espinoza Velázquez, quien identificó al caído y proporcionó a la policía datos de sus cómplices y la dirección de una casa de seguridad cerca del lugar del enfrentamiento, en donde se refugiaba la banda.
El resto de los pistoleros a quienes la policía relaciona con narcotraficantes desempleados de la zona lograron escapar. El velador, Elmer Espinoza, de 50 años de edad, fue liberado frente a la subestación eléctrica Nizuc, a unos diez minutos de la balacera.
El parte militar establece que el grupo de sospechosos sostuvo el tiroteo en el cruce de las calles Lázaro Cárdenas y Venustiano Carranza, junto a un negocio de video.
Cancún ,QR
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