“Eliminación de los supérfluos y purificación de la sociedad”: Govanni Papini (Narraciones- Gog)
Signos de nuestros tiempos: la FOM
Por: Xavier Méndez Camacho
Signos de nuestros tiempos son las noticias que nos llegan de Morelia, Michoacán, donde fueron flagelados, con golpes provocados con alambres de púas en la espalda y con cartulinas con mensajes pegadas al cuerpo en las que aceptan sus fechorías, cuatro delincuentes. “La Familia Michoacana” se adjudica estos crimenes como parte de “una depuración de la sociedad”. Más cruel, los cadáveres de seis personas fueron encontrados también, decapitados en Apatzingán, en la misma entidad, con la letra Z marcada con sangre y fuego en varias partes de sus cuerpos. Como los homeópatas, combaten el delito con el delito.
¿ Conoce usted la FOM ?
-Esta mañana, cuando me encontraba tranquilamente preparando mi itinerario, se me ha presentado un hombre de unos cincuenta años, amable, casi obsequioso que me ha dicho que debía hablarme a solas de cosas muy importantes. He hecho salir a mi secretaria y me he dispuesto a escucharle .
-¿ Conoce usted la Fom ? - me ha preguntado en voz baja el visitante.
-He de reconocer que jamás había oído hablar de ella.
-Me lo imaginaba. Y es mejor que sea así. Se trata, como le explicaré, de una liga secreta. Mis jefes consideran que la adhesión de usted sería infinitamente deseable.
He creido que se trata de una especie de Ku-klux-klan y le he contestado que no quería de ninguna manera meterme en sociedades secretas.
-Cuando le haya dicho lo que es la FOM estoy seguro que cambiará usted de opinión. El nombre, como puede imaginarse, es una sigla de iniciales. Nuestra Liga se llama Friends Of Mankin y su objetivo es absolutamente desinteresado. Sus fundadores, cuyos nombres no puedo decir por ahora han partido de este principio; el contínuo aumento de la Humanidad es contrario al bienestar de la Humanidad misma. Por mucho que la industria, la agricultura y la política colonial intenten suplir el déficit, está claro que dentro de algún tiempo existirá un balance demasiado desnivelado entre las provisiones para el banquete y el número de asistentes. Malthus tenía razón y únicamente se equivocó al creer demasiado próximo el desastre. En realidad la Naturaleza, bajo la forma de terremotos, volcanes, epidemias, carestías y guerras vienen diezmando periódicamente el género humano. También el tráfico automovilístico, el tráfico de estupefacientes y los progresos del suicidio contribuyen, desde hace algún tiempo a la reducción de los habitantes del planeta. Pero todas estas digámoslo así, medidas providenciales no consiguen contrarrestar el aumento de los nacimientos, sin contar con que, para las víctimas, son formas excesivamente dolorosas de supresión.
-¿Cómo remediarlo?.
-Aunque no hayamos llegado al hambre, está cerca el momento en que nuestras raciones habrán de ser reducidas. Y entonces interviene la FOM. La FOM se propone acelerar racionalmente la desaparición de los menos dignos de vivir. La nuestra podría llamarse en su primera etapa -Liga para la Eutanasia Inadvertida. El inconveniente de los estragos naturales -como las epidemias y las guerras- está en la supresión de los jóvenes, de los inocentes, de los fuertes. Pero si es necesario expurgar la tierra, sería justo, antes que nada, eliminar a los inútiles, a los peligrosos o aquellos que han vivido ya bastante. El terremoto y la Cólera son ciegos; nosotros tenemos ojos, y ojos buenos. Nuestra Liga se propone, pues, apresurar de manera dulce y discreta, y en el más absoluto secreto, la muerte de los débiles, de los viejos, de los inmorales y de los delincuentes. De todos aquellos seres que no merecen vivir y viven para sufrir o imponer gravosos dispendios a la sociedad.
-Los medios de los que nos servimos son los más perfeccionados: venenos que no dejan rastro; inyecciones en altas dosis, inhalaciones de gases anestésicos o tóxicos. La Moral pública, ofuscada por antiguas superticiones, no ha llegado aún a reconocer o, por lo menos a tolerar, nuestras benéficas operaciones, y por ello nos vemos obligados a trabajar en el más profundo misterio. Ninguno de nosotros, hasta ahora, ha sido descubierto. Y, a despecho de las dificultades, las estadísticas de natalidad, desde que está constituída la FOM, demuestran que nuestra filantrópica labor no ha sido inútil.
Junto a la sección, llamémosla tantófila , de la FOM existe otra igualmente importante, que podríamos llamar moralizadoras. Hay desdichadamente, delitos que los códigos no castigan o que la Policía no sabe descubrir. Nuestra Liga provee también a esa necesaria represión. Una junta, compuesta por profesores de moral y por juristas se ocupa de establecer una lista de culpables en estas y otras ciudades.
-Para las ejecuciones hemos tenido que recurrir a delincuentes profesionales o vuluntarios, que se encargan, siempre en riguroso secreto, de castigar a los culpables. Roban a los ladrones, a los avaros, a los estafadores; secuestran y apalean a los secuestradores que sistemáticamente persiguen a los niños y a los empleados; someten a penas humillantes a los orgullosos; envían cartas amenazadoras a los jugadores y contrabandistas; castigan de varias formas a los especuladores deshonestos, a los encubridores y demas personas dañosas e inmorales. Somos, en estos casos homeópatas: delito contra delito.
Para castigar el mal tenemos que resignarnos a inflingir el mal, pero la nobleza de nuestro propósito nos absuelve. ( Tomado de las Obras Completas de Giovanni Papini Tomo I Narraciones-Gog-1931).
Son signos de nuestros tiempos, son tiempos de la FOM.
Correo electrónico: xaviermendez2003@yahoo.com.mx
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