Antes de ser trasladados al Cereso de Apodaca, donde quedaron recluidos dichos sujetos, se apegaron a los beneficios del artículo 20 al rendir su declaración ante el agente del Ministerio Público Federal.
Los dos presuntos delincuentes que el pasado viernes en la noche fueron detenidos por elementos del Ejército al ser sorprendidos portando armas largas y ocultos en el interior de vehículos que tenían estacionados afuera del Penal de Topo Chico, fueron consignados al juzgado quinto de distrito en materia penal.
Ignacio González Hernández y José Manuel Pérez Loera quedaron a disposición del titular de dicho juzgado, quien los va a procesar por los delitos de portación de arma y cartuchos de uso exclusivo del Ejército y Fuerza Aérea.
Ellos al momento de ser detenidos tenían en su poder cuatro armas largas, 17 cargadores y 366 cartuchos de diversos calibres.
Antes de ser trasladados al Cereso de Apodaca, donde quedaron recluidos dichos sujetos, se apegaron a los beneficios del artículo 20 al rendir su declaración ante el agente del Ministerio Público Federal que integró la averiguación de los hechos.
El día que fueron detenidos Ignacio González y su cómplice estaban ocultos en dos distintos vehículos que tenían en el estacionamiento que está asignado sólo a empelados de la Procuraduría de Justicia y del Penal del Topo Chico.
Monterrey, NL
Los dos presuntos delincuentes que el pasado viernes en la noche fueron detenidos por elementos del Ejército al ser sorprendidos portando armas largas y ocultos en el interior de vehículos que tenían estacionados afuera del Penal de Topo Chico, fueron consignados al juzgado quinto de distrito en materia penal.
Ignacio González Hernández y José Manuel Pérez Loera quedaron a disposición del titular de dicho juzgado, quien los va a procesar por los delitos de portación de arma y cartuchos de uso exclusivo del Ejército y Fuerza Aérea.
Ellos al momento de ser detenidos tenían en su poder cuatro armas largas, 17 cargadores y 366 cartuchos de diversos calibres.
Antes de ser trasladados al Cereso de Apodaca, donde quedaron recluidos dichos sujetos, se apegaron a los beneficios del artículo 20 al rendir su declaración ante el agente del Ministerio Público Federal que integró la averiguación de los hechos.
El día que fueron detenidos Ignacio González y su cómplice estaban ocultos en dos distintos vehículos que tenían en el estacionamiento que está asignado sólo a empelados de la Procuraduría de Justicia y del Penal del Topo Chico.
Monterrey, NL
No hay comentarios:
Publicar un comentario