Existen al menos entre 80 y 90 internos de más en los reclusorios, y es que a falta de celdas y camas 474 reos de más duermen hasta en los pasillos de los diferentes penales del estado.
Será hasta mediados de agosto cuando la Comisión Estatal de Derechos Humanos tendrá listo un informe sobre la situación que guardan los centros penitenciaros en el estado, en donde se podrá adelantar que la sobrepoblación es un factor para depreciación de la calidad de su funcionamiento, dijo David Corrales García, primer visitador regional y encargado del área de penitenciaria del organismo.
Señaló que al momento de las revisiones únicamente los Ceresos de Torreón, Piedras Negras y Sabinas presentaban cierto porcentaje de sobrepoblación, que no era muy grave hasta hace unos meses.
Así mismo en la misma situación pero a menor escala, se encuentra el reclusorio de Saltillo, que siempre se había caracterizado por estar bajo de la capacidad instalada o cupo máximo, y en el que ahora hay alrededor de 80 internos de más.
Corrales García, indicó que todo esta situación viene a generar un desordenen los dormitorios, hacinamiento, habrá personas que duerman en los pasillos ante la carencia de celdas y eso también conlleva a que tenga que haber un desorden en cuanto a la división de internos, si no es en atención al fuero federal y al fuero común, sí lo es en cuanto a la atención jurídica, es decir, que pudiesen estar revueltos en mayor cantidad internos que están sujetos a proceso con aquellos que ya están sentenciados.
Además se pasa por alto la clasificación criminológica, haciendo posible que quien ha cometido robo por primera vez conviva con homicidas calificados.
Dijo que las malas conductas se copian cuando una persona, un interno, está sujeto a un proceso y se presume que no está probada su conducta delictiva, constitucionalmente no pueden estar cohabitando en un área una persona que por sentencia está declarado que es delincuente.
Esto es lo que la Comisión Estatal de Derechos Humanos ha encontrado en sus revisiones de los centros penitenciaros en Coahuila. Saltillo, Coah. (Milenio)
Señaló que al momento de las revisiones únicamente los Ceresos de Torreón, Piedras Negras y Sabinas presentaban cierto porcentaje de sobrepoblación, que no era muy grave hasta hace unos meses.
Así mismo en la misma situación pero a menor escala, se encuentra el reclusorio de Saltillo, que siempre se había caracterizado por estar bajo de la capacidad instalada o cupo máximo, y en el que ahora hay alrededor de 80 internos de más.
Corrales García, indicó que todo esta situación viene a generar un desordenen los dormitorios, hacinamiento, habrá personas que duerman en los pasillos ante la carencia de celdas y eso también conlleva a que tenga que haber un desorden en cuanto a la división de internos, si no es en atención al fuero federal y al fuero común, sí lo es en cuanto a la atención jurídica, es decir, que pudiesen estar revueltos en mayor cantidad internos que están sujetos a proceso con aquellos que ya están sentenciados.
Además se pasa por alto la clasificación criminológica, haciendo posible que quien ha cometido robo por primera vez conviva con homicidas calificados.
Dijo que las malas conductas se copian cuando una persona, un interno, está sujeto a un proceso y se presume que no está probada su conducta delictiva, constitucionalmente no pueden estar cohabitando en un área una persona que por sentencia está declarado que es delincuente.
Esto es lo que la Comisión Estatal de Derechos Humanos ha encontrado en sus revisiones de los centros penitenciaros en Coahuila. Saltillo, Coah. (Milenio)
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